Esta noche, la Orquesta Estable de la Provincia interpretará la Obertura de la ópera Las bodas de Fígaro, de Wolfgang A. Mozart, y el Concierto para violín y orquesta Op. 64, de Félix Mendelssohn, bajo la batuta de Carla Ábalos (Jujuy) con Penélope Albornoz como solista.
En la segunda parte se escuchará la Sinfonía N°5 Op. 64 de Piotr I. Tchaikovsky, que dirigirá Sebastián Mendizábal (Florencio Varela, Buenos Aires). Ambos directores son pasantes que han sido seleccionados para dirigir el segundo concierto final 2019 del Programa de Pasantías Federales de Perfeccionamiento en Dirección Orquestal del Consejo Federal de Inversiones (CFI) que se organiza junto a la Orquesta Sinfónica de Entre Ríos (OSER). Al programa se sumaron este año las provincias de San Juan y Tucumán.
Presentaron el concierto Ilda Estela García, coordinadora cultural por el CFI y Luis Gorelik, director de la OSER a cargo del programa de pasantías.
Gorelik es bien conocido por haber dirigido muchas veces en la provincia, sobre todo en los grandes conciertos de cierre del Septiembre Musical.
Esta vez vino como tutor, asesor musical y responsable del concierto. El maestro Gorelik resalta que el programa de pasantías, el primero en su tipo, ofrece una instancia de perfeccionamiento a muy alto nivel. Este año se incribieron más de cien directores de todas las provincias, y de ellos seis fueron aceptados para realizar ensayos, conciertos y clases junto a la OSER.
Un eslabón
“El programa viene a llenar un espacio en el mundo de la dirección orquestal, y la pasantía es como una residencia, el eslabón entre el estudiante avanzado y el profesional -explica-. Para mí es una alegría enorme porque me permite enseñar, transmitir experiencia y colaborar a la formación de nuevas generaciones de directores. Además la pasantía está orientada no sólo a lo musical sino, muy importante, al replanteo de los paradigmas actuales de nuestra profesión, en función de lo comunitario. No hay ninguna institución de formación artístico-musical que mencione o toque el tema. Estoy convencido de que un director de orquesta en la Argentina del siglo XXI debería cumplir un rol que excede lo estrictamente artístico-musical y pasar a ocupar el rol de liderazgo comunitario, a través de su función como activador cultural”.
HOY
• A las 22, en el teatro San Martín (av. Sarmiento 601). ENTRADA LIBRE Y GRATUITA.